U.S. Congressman Chris Van Hollan traveled to El Salvador to look into the case of Kilmar Armando Ábrego García, a migrant deported from the United States and imprisoned in the Centro de Confinamiento del Terrorismo (Terrorism Confinement Center, CECOT).
The congressman regretted President Nayib Bukele’s absence, so he met instead with Vice President Félix Ulloa, with whom he said he spoke about the more than two decades he has spent in Maryland combating gang violence such as that of MS‑13.
The senator stressed that the Ábrego García case bears no relation to criminal structures. “U.S. judges have said there is no evidence linking Mr. Ábrego García to MS‑13. In fact, a federal judge ruled that the Trump administration presented no proof to support that accusation,” the lawmaker said.
Van Hollan explained that Ábrego García legally resides in the United States, where he was granted refugee status and a work permit after a judge determined his life would be in danger if he returned to El Salvador. That decision, he emphasized, was issued during the Trump administration and was never appealed. Here are the congressman’s remarks, interpreted by translator Frieda Castellanos.
According to the congressman, Ábrego García was illegally deported from Maryland and taken to CECOT, a maximum‑security prison for people accused of terrorism and organized crime. “If U.S. courts say there is no evidence, and El Salvador has no proof he committed a crime, why won’t they release him?” he asked.
During the meeting, Félix Ulloa reportedly justified the detention by stating that the Salvadoran government is receiving payments to keep Ábrego García in custody. The congressman also noted that the U.S. Supreme Court ruled in favor of Ábrego García’s return by a vote of nine to one, yet there is still no sign that the U.S. government is complying with that decision.
He added that U.S. Attorney General Pam Bondi even offered to send a plane to repatriate the detainee, but the U.S. Embassy in El Salvador confirmed it has received no official order to that effect.
The senator requested a face‑to‑face meeting with Ábrego García during his visit, but the Salvadoran government refused, arguing that further arrangements were required.
Van Hollan insisted that the situation is untenable and that, although he is the first U.S. senator to take up the case in El Salvador, he will not be the last.
He also criticized a possible financial agreement between the Trump administration and the Salvadoran government worth up to US$15 million for El Salvador to house people deported from the United States. “Why pay to keep someone imprisoned who was taken illegally and has committed no crime?” he asked.
Finally, he urged Nayib Bukele to use his authority to free Ábrego García. “He is innocent. There are no charges, no conviction. As a sovereign country, El Salvador should do the right thing and let him go. And I hope it will,” the congressman said.
“I’m simply asking that CECOT’s door be opened and that this innocent man be allowed to walk free,” the lawmaker concluded.
Félix Ulloa justificó detención de Kilmar Ábrego al afirmar que El Salvador recibe pagos por su custodia
El congresista de Estados Unidos, Chris Van Hollan, visitó El Salvador para conocer la situación de Kilmar Armando Ábrego García, migrante deportado por el país del norte y encerrado en el Centro de Confinamiento del Terrorismo, CECOT.
El congresista Hollan lamentó la ausencia de Nayib Bukele, por lo que se reunió con el vicemandatario Félix Ulloa con quien dijo que habló sobre el trabajo que por más de dos décadas ha hecho en su estado, Maryland, para combatir la violencia de pandillas como la MS-13.
Además, el senador subrayó que el caso de Abrego García no tiene ninguna relación con estructuras criminales. Hollan dijo que “los jueces de Estados Unidos han dicho que no hay evidencia que vincule al señor Abrego García con la MS-13. De hecho, un juez federal declaró que la administración de Trump no presentó pruebas que sustentaran esa acusación”, sostuvo el legislador.
El congresista explicó que Abrego García reside legalmente en Estados Unidos, donde se le otorgó estatus de refugiado y permiso de trabajo, luego de que un juez determinara que su vida corría peligro si regresaba a El Salvador. Esta decisión, enfatizó, fue tomada durante la administración de Donald Trump y nunca fue apelada. Escuchemos lo que dijo el congresista en la voz de la traductora Frieda Castellanos.
Según la denuncia del congresista, Abrego García fue deportado de forma ilegal desde Maryland y trasladado al CECOT, una prisión de máxima seguridad destinada a personas acusadas de terrorismo y crimen organizado. “Si los tribunales estadounidenses dicen que no hay evidencia, y El Salvador no tiene pruebas de que cometió un crimen, ¿por qué no lo liberan?”, cuestionó.
Durante la reunión, Félix Ulloa, habría justificado la detención afirmando que el gobierno salvadoreño está recibiendo pagos por mantener a Abrego García en custodia. El congresista también señaló que la Corte Suprema de Estados Unidos falló a favor del retorno de Abrego García por una votación de nueve contra uno, pero que, hasta el momento, no hay evidencia de que el gobierno estadounidense esté cumpliendo con esta resolución.
Asimismo, afirmó que incluso el fiscal general de Estados Unidos, Pam Bondi, ofreció enviar un avión para repatriar al detenido, pero la embajada estadounidense en El Salvador confirmó que no ha recibido ninguna orden oficial al respecto.
El senador solicitó reunirse personalmente con Abrego García durante su visita, pero el gobierno salvadoreño se negó a facilitar el encuentro, argumentando que se requerían más gestiones.
El congresista aseguró que esta situación es insostenible y que, aunque es el primer senador estadounidense en abordar este caso en El Salvador, no será el último.
Asimismo, criticó un posible acuerdo económico entre la administración Trump y el gobierno de El Salvador, que contempla hasta 15 millones de dólares para que este país albergue a personas deportadas de Estados Unidos. “¿Por qué pagar para mantener encarcelado a alguien que fue llevado ilegalmente y no ha cometido ningún crimen?”, cuestionó.
Finalmente, pidió a Nayib Bukele que ejerza su autoridad para liberar a Abrego García. “Es inocente. No hay cargos. No hay condena. Como país soberano, El Salvador debe hacer lo correcto y dejarlo ir. Y espero que así lo hagan”, dijo el congresista.
“Solo estoy pidiendo que se abra la puerta del CECOT y se deje salir a este hombre inocente”, concluyó el legislador.